Oud Imperial de Perris Monte Carlo: el alma dorada del Oriente convertida en perfume

Familia Olfativa: Oriental Amaderada

Notas de Salida: Alcaravea y jazmín

Notas de Corazón: Madera de oud, incienso, pachulí y azafrán

Notas de Fondo: Palo de rosa de la India, ládano, vetiver, sándalo y cedro

Perfumista: Luca Maffei

Año de Lanzamiento: 2012

Desde el primer instante, Oud Imperial de Perris Monte Carlo despliega un aura hipnótica que desafía las convenciones y trasciende el tiempo. Esta creación magistral de Luca Maffei no es simplemente una fragancia, sino una experiencia sensorial que rinde homenaje al mítico oud: esa madera resinosamente oscura que durante siglos ha sido símbolo de lujo, espiritualidad y misterio en las culturas orientales.

Al aplicarlo sobre la piel, una sinfonía inesperada abre el telón: la alcaravea despliega su carácter especiado y ligeramente anisado, mientras el jazmín añade un susurro floral, luminoso y seductor que suaviza las aristas con una elegancia sobria. Es una introducción breve, pero intensa, como el primer acorde de una ópera que augura una historia vibrante por contar.

En el corazón de la composición emerge la estrella indiscutible: la madera de oud, intensa, cálida y envolvente. Pero este oud no viene solo: lo acompaña un incienso profundo y meditativo, que evoca templos antiguos y ceremonias sagradas. El pachulí aporta un matiz terroso y misterioso, y el azafrán añade un toque dorado, especiado y casi cremoso, como si cada nota del perfume estuviera tejida en hilos de seda oriental.

El viaje olfativo se asienta en una base lujosa y poderosa. El palo de rosa de la India aporta una dulzura amaderada y exótica, mientras que el ládano introduce un acorde ámbar-resinoso, con un trasfondo animalístico y envolvente. El vetiver, el sándalo y el cedro se entrelazan en un lecho aromático que respira nobleza, carácter y sobriedad. Esta estructura amaderada de fondo asegura una fijación majestuosa y una estela imponente, sin ser invasiva.

Oud Imperial no es un perfume para pasar desapercibido. Es un manifiesto de identidad y distinción, un tributo a las materias primas más nobles de la perfumería nicho, presentado con la elegancia refinada que caracteriza a la casa Perris Monte Carlo. Cada gota encierra un equilibrio perfecto entre tradición oriental y savoir-faire europeo, entre lo místico y lo contemporáneo.

Ideal tanto para hombres como para mujeres, esta fragancia trasciende el género y las estaciones. Es perfecta para momentos especiales, pero también lo suficientemente sofisticada para convertirse en una firma olfativa diaria de quien se atreve a destacar con discreción poderosa.

Oud Imperial invita a un viaje sensorial a través de los bazares de Medio Oriente, los templos perfumados del Sudeste Asiático y los salones dorados de Monte Carlo. Un perfume que habla de elegancia atemporal, de espiritualidad, y de una belleza que no grita, pero que deja huella profunda.

En el universo de la perfumería nicho, esta creación se sitúa como una joya imprescindible para los amantes del oud auténtico, sin excesos, sin concesiones, pero con una sofisticación que lo convierte en una obra maestra del arte olfativo. ¿Te atreves a vestir la piel con la esencia del Oriente más noble?